Violencia y discriminación entre gays

Las causas de la violencia y discriminación entre los mismos miembros de la comunidad LGBT son múltiples pero en general se explican por el machismo y la homofobia, reinante, incluso, entre los homosexuales.

La violencia de género entre parejas del mismo sexo es una realidad en nuestro país”, aseguró el activista Gabriel Gutiérrez en el marco de la Semana de la Diversidad Sexual organizada por alumnos del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM).
Los miembros de la comunidad de lesbianas, gays, bisexuales y transgéneros (LGBT) no sólo son víctimas de la violencia y discriminación ejercidas por personas heterosexuales, sino también por los propios miembros de la comunidad gay.
Un sondeo realizado por la agencia de noticias Anodis.com, reveló que los más discriminados por la propia comunidad son los calificados como afeminados.
Las causas de la violencia y discriminación entre los mismos miembros de la comunidad LGBT son múltiples pero en general se explican por el machismo y la homofobia, reinante, incluso, entre los homosexuales.
A su vez, el también conductor del programa radiofónico Código Diverso, explicó que la violencia entre las parejas del mismo sexo se califica como violencia de género dado que los individuos dentro de una relación asumen roles y patrones: el rol femenino y el rol masculino, pasivo y activo respectivamente.
La violencia ejercida al interior de las relaciones homosexuales es tanto visible como invisible: física, psicológica, sexual, económica, tal como sucede en las relaciones heterosexuales. No obstante, es una situación poco aceptada tanto por la sociedad en general como por las instituciones públicas.
A pesar que la ciudad de México se ha ganado el calificativo de "gay friendly" por los recientes avances en materia jurídica que permiten el matrimonio entre personas del mismo sexo y la adopción de menores por parte de parejas homosexuales, se encuentra un retraso en la prevención y atención de esta problemática con respecto a ciudades europeas como Londres y Madrid donde han iniciado campañas preventivas en contra la violencia al interior de las parejas del mismo sexo, e incluso se ha desarrollado la infraestructura para atender los casos que se presenten.
Es necesaria no sólo “la promoción de una cultura de educación para la paz y la reflexión urgente hacia el interior del colectivo LGBT entorno a los diferentes tipos de violencia a las que somos sometidos, pero que también ejercemos, sino también el estudio interdisciplinario de esta realidad social”, concluyó Gabriel Gutiérrez.